Desde el Partido Justicialista de la Provincia de Santa Fe manifestamos nuestro más enérgico repudio a las declaraciones realizadas por el presidente Javier Milei en el Foro de Davos. No podemos ni debemos quedarnos callados frente a un nuevo atropello discursivo y gestual que, lejos de ser casual, forma parte de una estrategia política que busca denigrar la pluralidad y cercenarla.
Los discursos de odio generan círculos violentos en tanto solo reproducen más odio. Si estos discursos, además, provienen de la máxima autoridad nacional, abren la posibilidad de que se generen hechos y acciones que nada tienen que ver con la convivencia democrática.
Desde nuestras tradiciones, siempre defensoras de la ampliación de derechos, reivindicamos las políticas públicas construidas a lo largo de años de lucha junto a los movimientos feministas, el colectivo LGBTIQ+, los organismos de derechos humanos, las leyes nacionales y los tratados internacionales a los que nuestro país adhiere y debe respetar. Abrazamos cada conquista y acompañamos cada reclamo en pos de una sociedad más justa y humana.
No nos expresamos desde el rencor ni la nostalgia sino desde la convicción que anida en una historia que, con matices y a través de los acuerdos y tensiones propios de un movimiento comprometido, ha acompañado el devenir histórico, haciéndose eco de necesidades y urgencias desde mediados del siglo XX hasta la actualidad.
El Partido Justicialista ha jugado un papel fundamental en este proceso. Desde sus orígenes, ha promovido políticas orientadas hacia la ampliación de derechos, la igualdad de género y la justicia social, entendiéndolas como políticas esenciales para la construcción de una sociedad más equitativa y democrática.